Aún quedan más de dos meses para que el festival Rock in Río celebre su primera jornada de conciertos en Arganda del Rey (Madrid), pero el compromiso social adherido a su imagen de marca ya ha iniciado sus primeras acciones en España, relacionadas con la lucha contra el cambio climático.
El festival, que aúna en cada una de sus ediciones solidaridad y música, dedica sus esfuerzos de este año al Medio Ambiente tanto en Lisboa como en Madrid, las dos ciudades en las que se celebra Rock in Río 2008 bajo el sobrenombre “por un mundo mejor”.
El certamen dedicará entre un dos y un cinco por ciento de la venta de entradas a causas sociales.
Así lo explicó hoy en Madrid la vicepresidenta de Rock in Río, Roberta Medina, responsable del festival, que contará con Amy Winehouse, Shakira, The Police, Neil Young, Franz Ferdinand y Lenny Kravtiz, entre muchos otros artistas, los próximos 27 y 28 de junio y 4, 5 y 6 de julio.
Rock in Río ya ha comenzado las labores de reforestación de parte de Los Pinares del Ducado de Medinaceli (Guadalajara), zona que quedó calcinada tras un incendio en el verano del 2005, mientras que en el mes de mayo iniciará la plantación de 50.000 árboles en Bosque Sur, situado en Getafe (Madrid), como fruto del acuerdo que este evento musical mantiene con la Comunidad de Madrid.
El festival, cuya primera edición se celebró en Brasil en 1985, busca desde 2001 “usar su impulso mediático y el de sus representantes en favor de un mismo mensaje”, según palabras de Roberta Medina, y cuenta en esta ocasión con la modelo Almudena Fernández como embajadora de su proyecto social, tras la colaboración del cantante Alejandro Sanz.
La principal acción del compromiso que Rock in Rio ha adquirido con España tendrá lugar en la ciudad donde se celebra el evento, Arganda del Rey (Madrid), con la creación del Bosque de la Música.
Se trata de un espacio de cerca de 24.000 metros cuadrados, situado en el casco urbano de la ciudad, con una intención educativa y de ocio, explicó Medina junto al alcalde de Arganda, Ginés López.
López recordó que Arganda del Rey ha creado la “alianza de ciudades por un mundo mejor” firmando acuerdo con las anteriores sedes del festival, Río de Janeiro y Lisboa.
La primera intención del festival es la de compensar las emisiones de dióxido de carbono que un acontecimiento de esta magnitud puede generar.
Para ello ha decidido reducir emisiones controlando la energía, con paneles fotovoltaicos -sistema que permite obtener energía por medio de irradiación solar- e iluminación de bajo consumo, prestando especial atención al reciclaje de los residuos resultantes y utilizando medios de transporte híbridos.