Los restos de Facundo Cabral, asesinado el sábado pasado en la capital guatemalteca, fueron repatriados hoy a Argentina, mientras avanzan las investigaciones tras establecerse que el ataque en el que murió el cantautor iba dirigido contra el empresario Henry Fariña y fue perpetrado por el crimen organizado.
El féretro con el cadáver del cantautor fue llevado en un cortejo fúnebre hacia la sede de la Fuerza Aérea Guatemalteca (FAG), en el sur de la capital, donde fue despedido, entre otros, por el vicecanciller de este país, Erick Maldonado.
En el trayecto, que duró un poco más de 15 minutos, decenas de guatemaltecos despidieron con aplausos y lágrimas los restos del trovador, que había dado dos conciertos la semana pasada en la capital y Quetzaltenango (oeste).
El embajador de Argentina en Guatemala, Ernesto López, quien acompaña los restos, que son transportados en una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana, explicó a periodistas que tienen previsto llegar mañana temprano a Buenos Aires, luego de hacer una escala técnica en Lima (Perú).
“Al llegar a Buenos Aires entregaremos los restos a su familia y ella sabrá qué hacer”, expresó.
La familia de Cabral, según dijo hoy Pablo Pérez, exrepresentante del cantautor, respetará la voluntad del artista y no velará su cadáver, que será incinerado después de ser repatriado a Buenos Aires.
“Los restos llegarán mañana y la voluntad de Facundo es que fuera cremado, así que, en principio, no va a haber nada en contrario”, señaló Pérez, quien representó a Cabral hasta hace un año y medio, pero con quien mantenía una estrecha relación.
La aeronave, que salió de Guatemala hoy hacia las 19.00 hora local (01.00 GMT del martes), tiene previsto llegar a Buenos Aires mañana martes a las 07.30 hora local de Argentina (10.30 GMT).
Junto al embajador argentino, también viajan el ministro guatemalteco de Cultura, Héctor Escobedo, y la directora de Protocolo de la Cancillería, Verónica Grajeda.
Cabral, de 74 años, fue asesinado el pasado sábado en un sector del sur de la capital guatemalteca cuando se dirigía hacia el aeropuerto internacional La Aurora, en compañía del promotor nicaragüense Henry Fariña, quien resultó herido.
El asesinato provocó consternación y repudio en varios países latinoamericanos, que han demandado a las autoridades guatemaltecas esclarecer el hecho.
En ese sentido, el presidente de Guatemala, Álvaro Colom, dijo hoy a Efe que las autoridades de su país sospechan que “sicarios internacionales” a la orden de grupos del crimen organizado están detrás del asesinato del cantautor argentino.
El ataque estaba dirigido en contra de Fariña, quien llevaba a Cabral hacia el aeropuerto de la capital guatemalteca, y “hay muchas probabilidades de que no sean sicarios nacionales, sino que puedan ser de otros países” quienes lo perpetraron, reiteró Colom.
“Estoy seguro de que el hecho del sábado está relacionado con algún negocio del crimen organizado internacional. Las bandas criminales de la región están conectadas y sus negocios están en toda Centroamérica”, dijo el mandatario en entrevista con Efe.
Colom aseguró que han pedido colaboración a los Gobiernos de Nicaragua y Panamá en la investigación, ya que sospechan que los asesinos pueden ser originarios de alguno de esos países.
“Nicaragua y Panamá están colaborando en este frente común”, aseguró.
El auto en el que se trasladaban Cabral y Fariña recibió al menos 25 disparos: tres impactaron en el argentino, uno de ellos mortal en la cabeza, y otros ocho en el empresario nicaragüense de 40 años, quien permanece en un centro de salud guatemalteco fuera de peligro de muerte, según los médicos, y bajo fuertes medidas de seguridad.
Fariña es un promotor de conciertos y propietario de una cadena de clubes nocturnos con presencia en toda Centroamérica, de acuerdo con los datos disponibles.
Colom dijo a Efe que por el momento no puede revelar los detalles para no entorpecer el trabajo, pero insistió en que el blanco del ataque era Fariña.
La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un organismo adscrito a Naciones Unidas, se unió a las investigaciones de este hecho en las cuales participan cinco equipos de investigadores especializados y un grupo de fiscales.