La carrera artística de la soprano griega María Callas (1923-1977), una de las grandes divas del “bel canto” en el siglo XX, se presenta en la exposición “Callas. 30 años después”, inaugurada en Atenas por el primer ministro griego, Costas Caramanlis.
La muestra, que conmemora los 30 años de la muerte de la diva y dentro del “Año María Callas 2007”, ofrecerá hasta el próximo octubre en la galería de la Fundación del Parlamento griego objetos de la artista pertenecientes a fundaciones y colecciones privadas.
Un catálogo acompaña a la exposición, que relata la historia de la ópera, la trayectoria profesional de Callas y destaca sus cualidades únicas como soprano en una época en que “se sentaron nuevas bases para la música dramática”.
Nacida en Nueva York en 1923, viaja a Grecia con su madre en 1937 y recibe dos años más tarde sus primeras lecciones de canto de la soprano española Elvira de Hidalgo en el Odeón de Atenas.
Las fotos, partituras, programas de actuaciones, trajes, objetos personales, discos y libros, llevan al público en un viaje iniciático desde la infancia de la soprano hasta su muerte en soledad, a causa de un ataque cardíaco en su lujoso apartamento de París.
Estatuas con su boceto, obra de artistas griegos y extranjeros, maquetas de trajes y de escenarios, material audiovisual de su carrera, adornan la exposición.
Además, se puede apreciar el piano “Steirway and Sons”, que utilizaba Callas y que se encontraba en el salón del crucero del magnate griego, Aristóteles Onassis, pareja de la diva durante muchos años hasta que contrajo matrimonio con Jacqueline Kennedy, y entre los documentos se destaca el primer contrato de trabajo en 1940 con el Teatro Real de la capital griega.
Diversos documentos fueron prestados por la Scala de Milán, el teatro Arena de Verona, y otros teatros y fundaciones.
Me movía sobremanera cómo ella interpretaba “Un bel di veldremo” y “o mio babbino caro”— La Kalogeropulos siempre en mi corazón. Gracias por esta nota Ruth!