Mítico icono de la cultura japonesa, “Astro Boy”, el niño robot que nació en un cómic nipón en 1951, debutará en la gran pantalla de la mano de varios profesionales latinos veteranos en crear animación para Hollywood.
El nuevo “Astro Boy” mantendrá la esencia del dibujo de Osamu Tezuka, considerado el “dios del manga” y “el padre del anime” (animación japonesa), aunque será un poco más adolescente y menos niño -en lugar de 8 años tendrá 12-, y alternará su apariencia semidesnuda con escenas en las que llevará ropa normal para acentuar su lado humano.
El proyecto, que verá la luz en octubre en EEUU y a principios de 2010 en América Latina, se apuntó a la actual tendencia de la meca del cine de buscar historias en los orígenes de personajes conocidos, como ha pasado con Batman, X-Men, o la saga Star Wars.
“Es un regreso al manga original” aseguró a la prensa el director del filme, el británico David Bowers (“Flushed Away”, 2006), quien descartó que hubiesen tomado como referencia las series de televisión realizadas sobre el personaje en las décadas de los 60, 80 y en 2003.
La recreación de ese símbolo japonés fue un reto para el equipo de la película que tuvo al argentino Luis Grane al frente de la creación de personajes, al español José Valencia como director de fotografía y a la británica de origen chileno Pilar Flynn en tareas de producción.
La idea subyacente del estudio Imagi era recuperar a este “pinocho” nipón robotizado y convertirlo en un fenómeno mundial que sirva de seña de identidad de la compañía, que tiene intención de competir con Pixar y DreamWorks Animation.
“Astro Boy” volverá a la vida con vocación de saga, por eso el argumento de esta presumible primera película resulta una presentación del personaje.
La trama cuenta desde su fabricación, debido a la obsesión de un padre abatido por llenar el vacío dejado por su hijo muerto, al drama de un niño diferente que busca su lugar en el mundo y que será convertirse en un héroe.
“Quería hacer algo global, nuestros productores en Japón también querían lo mismo, que no solo fuera destinado al público nipón. Mi meta era hacer algo que funcionase bien tanto en occidente como en oriente”, afirmó Bowers.
El equipo del filme, no obstante, confesó su inquietud por la acogida que tendrá la película en el país del sol naciente, donde “Astro Boy” es “el Mickey Mouse japonés”, en palabras de la productora Maryann Garger.
Con el objetivo de ser fieles al icono de Tezuka, el estudio contó con la participación en el proyecto del hijo del dibujante y también cineasta, Makoto Tezuka, quien ejerció de consultor externo al proyecto.
“Él estaba más preocupado por cómo era el personaje de Astro Boy, que no le pusiéramos bigote -bromeó- que por la historia en sí. Quería que el diseño tuviera relación con el original y que el argumento fuese fiel a la personalidad del protagonista”, comentó Grane.
El hecho de que el descendiente de Tezuka diese el visto bueno a la producción tranquilizó en cierto modo a Bowers y a Grane (“The Prince of Egypt”, 1998), quienes se alejaron del “anime” y prefirieron apegarse a una narrativa más occidental.
“Es una versión”, dijo Grane. “Hubo una inspiración en manga aunque estéticamente no se ve como manga, está más en la tradición de Disney que de ‘anime’ aunque con respeto al original. Hay algunos robots que tienen raíz manga”, comentó el argentino quien usó algunas esculturas precolombinas como base para varios personajes.
“Hay secuencias en las que los movimientos de cámara pueden recordar a la estética de ‘Gladiator’ de Ridley Scott”, aclaró Valencia (“Stuart Little”, 1999), en referencia al estilo visual, pensado para competir con los grandes estudios estadounidenses.
“Astro Boy” se distribuirá en 2D a pesar de la creciente popularidad de las tres dimensiones para las cintas animadas, si bien la siguiente producción de Imagi, “Gatchman” (basado en una serie de televisión nipona), se estrenará en la primavera de 2011 en 3D. EFE